jueves, 14 de febrero de 2008

Plática entre dos rosas

Arrejuntáte compañera
mañana nos van arrancar,
nos llevarán lejos
de nuestro rosal,
deja morir un pétalo,
y salvémonos
de la bellaza traidora,
o huérfana quedaràs
fuera del racimo,
con un destino,
el amor desapasionado.

Deja tus pétalos más lindos
caer sobre la tierra,
permite que nos dejen
vivir y no ser espectadoras
de noches pecadoras.

Ven hermana mía,
tus espinas nada
impedirán al
señor de patas largas
y saltones ojos,
dejarnos sin tierra
donde reposar.

Destino inmutable,
desaparecer desdichas,
causar lágrimas
incitar besos,
Victoria nos oiga,
no seremos
más sus mensajeras,
déjanos seguir
repartiendo
nuestros olores,
por el campo.

Jóvenes enamorados,
venga a nuestro rosal,
dejen caer sus cuerpos
sobre nuestras espinas
y con esa sangre,
juren amor eterno,
fusionen sus cuerpos,
y nosotras con nuestros
aromas, guardaremos
testigo de sus desnudos
cuerpos.