jueves, 12 de febrero de 2009

Un doce de febrero

Cuantas cosas has pasado
un doce de febrero,
un día de clases, una fiesta,
un viaje, un rencuentro,
pudo haber sido un día
sui generis, diferente,
o habitual, monótono
sin nada en especial.

Quizá un doce de febrero
endurezca la piel
y mi labios sedan
al sonido de la nada,
y como flauta recalentada
con soplidos bajos,
se desvanezca el
viejo caudal.

ya no queda fechas en el
calendario, ya no habra un dia
trece, no habra tiempo
que esperar,
he de quedarme con el dia
doce, fijarme como
raiz en tierra,
y ya no habra mas que esperar
he desaparecido al tiempo
y con él,
he de ser afortunado
eterno de la nada,
del olvido,
y ya no habra
imprenta que escriba
dia doce de febrero.